lunes, octubre 10, 2005

Damos asco

Por las aguas del estrecho flotan claveles negros...

No dejo de ver dia sí dia también noticias acerca de nuestras queridas fronteras sureñas. Las alambradas que separan el hambre del paraíso hace ya mucho tiempo que me sacan de quicio.
Damos asco porque la única solución que encontramos para arreglar nuestros problemas con las vallas fronterizas en Ceuta y Melilla, es augmentar el numero de metros de altura de éstas. Damos asco porque mientras los subsaharianos (Término bastante infeliz, por cierto. Me gustaría saber cómo nos sentaría que los franceses nos llamasen a partir de hoy subpirenaicos) se apiñen en el monte Gurugú y no les dé por intentar escapar del hambre, la disentería y la miseria en general, aquí no hay ningún problema. Pero si resulta que empiezan a matarse/matarlos en el intento, eso ya no es tan fácil de acallar y hay que hacer algo. Solución: Complicarles más la vida.
Ahora el drama está en esa frontera. Cómo si el que miles de negros floten en el estrecho de Gibraltar todos los años no fuese lo bastante dramático. Pero como eso ya está muy visto, casi que da igual.
Ahora ya el colmo de la deshumanización pasa por cojer a aquellos que han visto su tentativa frustrada y dejarlos a 2.000 km de nuestra frontera, sin agua ni comida, en medio del desierto y largarse de allí. Genial. Valientes hijos de puta.
No quiero entrar a especular en qué coño pasaría si borraramos de un plumazo todas las fronteras. Pero sí que podriamos empezar a pensar en darles oportunidades y enriquecer sus paises en vez de explotarles y negarles sus derechos. Porque no olviden que el problema de que ellos se mueran de hambre es única y exclusivamente nuestro. De nuestro mundo desarrollado. De nuestro estado del bienestar.
Y cuando digo que damos asco me incluyo por supuesto, porque tampoco soy capaz de encontrarle una solución y no puedo dejar de sentirme culpable. Lo siento. De veras que lo siento.

Sí, señores. Tenemos nuestro propio muro de la vergüenza.

"Por las aguas del estrecho
flotan claveles negros..."

6 comentarios:

Unknown dijo...

Tienes toda la razón.

Gorka dijo...

Hola,

en el fondo, esos tipos de horondas barrigas se preocupan de sus culos, pero debemos comprender que por eso de lo que más se preocupan es de retener nuestros votos.

Si alguno de esos dijera en su (nuestro) país que perdonamos deudas a países pobres, que vamos a dejar de gastarnos X cantidad de dinero en lo que sea para nosotros porque se lo vamos a dar a los que lo necesitan más que nosotros, seguro que muchos recularían en sus posiciones y les tacharían de no velar por los intereses de sus votantes.

No es sólo su culpa, en realidad es de todos.

Salu2.

hetsah dijo...

vivo en un país lleno de árboles
y de gente que se muere de hambre
gente que emigra para encontrar más dinero
porque cualquier tipo de sueño que te saque de tu país para irte a trabajar a otro, es un sueño económico
vivo en un país donde los campesinos dejan de cultivar alimentos para cultivar amapolas
en un país donde a la gente la detienen en los aeropuertos -en cantidades extraordinarias, porque aquí todo parece espantosamente extraordinario- todos los días, todas las horas
vivo en un país tercermundista
vivo en una américa de lso americanos -porque según ellos está ya no es, nisiquiera, nuestra tierra-
los que se van dejan, acá, incluso la dignidad?

el Biter dijo...

Buen post, si señor.

Anónimo dijo...

Es muy fácil colonizar un continente entero, expoliarlo, inventarte fronteras hechas con escuadra y cartabón... y luego abandonarlo una vez que lo has diezmado.

Y cuando, como resultado, has creado kilómetros y más kilómetros de miseria, vuelve la cabeza a un lado, que eres de los afortunados, de los del lado "acertado" del mar... el problema ya no es tuyo y lo único que te molesta es cuando se amontonan imágenes que hacen danyo en las conciencias adormecidas.

Tenemos mucha responsabilidad en lo que está pasando, y que naciéramos de este lado es sólo cuestión de suerte. No lo olvidemos...

-Bruji-

Arturo Borra dijo...

Comparto lo que decís punto por punto. Sólo señalaría que la política de cercamiento responde a un proyecto que es europeo. No se trata sólo de xenofobia, sino también de clasismo o como lo llaman, fobia a los pobres.
En cualquier caso, es positivo escuchar autocríticas así.
Saludos