viernes, marzo 31, 2006

Let's go

Viernes. A tomar por culo el curro. Portazo al salir.
Que os den. A partir de las 7 P.M. de hoy y hasta el lunes que llegue como siempre a la hora que me salga de los cojones (esto lo explicaré algún día, porque tiene su gracia) el tiempo es mío. Las conversaciónes son mías. Las risas son mías. Los apretones de manos son míos.

Me voy con vosotros. Con la gente con la que me gusta estar y con la que me gusta reír.



Nota para los barceloneses y afines: Hoy, en la Báscula (C/ del Foc, 128) -Zona Franca- a las 22:30 hay un doble concierto. Dos grupos conocidos por el menda. Uno de una especie de rock con trasfondo cubano y otro de Funk. El precio? 2 euros con consumición. Más que gratis oiga!
Pues eso. Esta noche kancerbero estará zorreando por ahí. Sean bienvenidos.

Otra cosa, no sé si estoy entrando en alguna sucia estratagema publicitaria, pero estos días está circulando esto por ahí... Entrañable.
Yo lo quería poner como canción de hoy pero no, todo tiene un límite.

> Er video aquí.

Pero lo que más rabia da, es que el condenao canta bien.


Nota a todos los blogeros del mundo: Hijos de puta! Dejad de utilizar el Castpost! esto va cada día más lento, coño!

martes, marzo 28, 2006

Echando un vistazo atrás

El otro día, después de comer, aún me quedaba un rato para empezar a currar y me dio por leerme un rato. Empecé a bucear por este blog y remontarme un poco al pasado.
Recuerdo cuando empecé a escribir aquí. Para nadie. Era un sitio en el que podía contar mis cosas y que cualquier desconocido que llegara casualmente, podía leer.
Después empezaron a llegar los primeros tímidos lectores asiduos y aunque yo no lo esperara empezaban a hacer sus aportaciones. Eso estuvo muy bien y se lo agradezco infinitamente. Que lo sepan. De hecho aún andan por aquí por lo que les corresponde un pack de cervezas el día que se me presente la oportunidad.

Tengo que decir que después de haber leído gran parte del blog del tirón me he dado cuenta de que me gusta. Me gusto. O mejor dicho, me caigo bien. Pero también es cierto que gran parte del mérito de que esto sea así es vuestro. Leeros responder siempre me arranca una sonrisa y cómo no, me anima a continuar.
Aún no me ha llegado ninguna crisis de estas que afectan a muchos blogeros y que les empuja a desistir. Ha habido épocas más secas que otras pero siempre he sentido la necesidad de volver aquí de vez en cuando, sea por mí o por vosotros. Y cuando digo vosotros, me refiero a TODOS vosotros. A los desconocidos, conocidos y semiconocidos.

En serio que yo, al principio, pensaba que con escribir para mí solo era suficientemente motivador, pero lo cierto es que si no supiera que de vez en cuando os pasais a leer las desbarradas de este tipejo, esto tendría mucha menos gracia.

Todos esto, aparte de para haceros la pelota de una manera escandalosa, sirve también para rellenar hueco, que estamos a martes y no se me ocurría qué contaros.

También es una llamada a toda esa gente que se pasa por aquí y no escribe, que la hay fijo. No se corten, si les da vergüenza piensen que el que expone aquí parte de su alma soy yo. Aquí cabe todo dios y cualquier parida es bien recibida.

Si no se les ocurre qué poner, hagan como yo. Pongan lo primero que se les pase por la cabeza. Juro que muchas veces lo hago. De hecho muchas veces ni siquiera me lo vuelvo a leer. Si no, fíjense en las contínuas faltas de ortografía que se irán encontrando por ahí. Que a veces, clama al cielo, la verdad. Espero sepan comprenderlo.

Esto... no sé qué más poner...

Ya. Podríais hacerme un favor... Echarle un vistazo al blog y me decís algún post que os guste especialmente. Si pasáis de hacerlo lo entenderé, pero entonces lo que podéis hacer es poner alguno que recordéis que os gustara y si también pasáis de eso pues entráis en un mes al azar y escogéis uno. Y si también pasáis de eso, mi paciencia infinita os lo seguirá perdonando únicamente si escribís un comentario diciendo que pasáis como de la mierda. Pero decirlo.

Si eres nuevo, no te asustes, normalmente me lo curro más, pero es que tengo que pasar lista y no sé cómo hacerlo.


Kancerbero! Presente!

viernes, marzo 24, 2006

Mañana sol y buen tiempo...

... que decían mis queridos Kortatu.

Parece que mañana el sol partirá las piedras. Y nos toca labrar. Al menos me pondré moreno. Disfruten de sus playas, piscinas, charcas, barreños, mangueras o cualquier cosa que moje y que tengan a mano.

Después del despliegue creativo de esta semana, por otra parte poco habitual y que dudo que se vuelva a repetir, me despido hasta el lunes, con esta canción:



Unos pogos el viernes siempre ayudan a desatascarse de la semana de rutina. Aunque vaya semanita más borracha que me he pegao.
Si ej que...

buen fin de semana a todos
que tengan mucho sexo. Y si no tienen mucho, el que tengan que sea bueno.

jueves, marzo 23, 2006

virus

Debe hacer como... unos... 12 ó 13 años (diooossssss) que conseguí mi primer PC. Era un 286 casi nuevo, con 40 megas de disco duro y 1Mb de RAM. Un pepinazo. Me salió barato porque había estado expuesto en no se qué feria. Creo que fueron 70.000 pelas. Cuando todo el mundo sabe que un ordenador lleva valiendo unas 150.000 pelas desde que se inventaron hasta hoy.

Por entonces ya había tenido mis primeros encuentros con la programación. Empecé con un MSX de mi primo, de esos que eran un teclado con una platina de cassette (joder, con cada linea que escribo me siento más carcoma) y que enchufabas a la tele. Pero claro, tenía el gran defecto de que si lo apagabas, tus 6894 lineas de programa en BASIC se iban a tomar por culo. Y tenías a toda la família en el comedor detrás tuyo esperando a que dejaras de escribir gilipolleces (que después se convertían en cualquier calculadora estúpida o en algún dibujo triposo) porque querían ver la tele.

Por la época en que empecé a escribir programas que no se borraban, me empezaron a llegar noticias de un fenómemo que me dejó fascinado. Los virus.
Se trataba de programas muy cabrones, que se quedaban pegados a tus archivos .exe, .bat, .com y que hacían que éstos empezaran a hacer cosas raras. Lo mínimo que te podía ocurrir era que se te jodiera el programa en cuestión y después también encontrabas torturas de todo tipo dependiendo de la mentalidad del cachondo de turno que lo hubiera creado. Todos hemos oído hablar de pelotitas que rebotaban por la pantalla mientras te lo iban borrando todo, o de las letras que empezaban a despegarse de la pantalla y caían hacia abajo mientras tu ponías una cara de tonto muy digna de ver.

Yo alucinaba. Unas lineas escritas, que hacían que todo programa que se ejecutara en un ordenador infectado quedara automáticamente contagiado. Y eso no era lo peor, lo peor es que se propagaban. Metías un disquette en tu ordenador enfermo, le pasabas un juego chorra a un amiguete y ya le habías jodido. Tu bichito se propagaba a su ordenador.
Y yo seguía alucinando.

Entonces, fue cuando me decidí a perseguirlos. Viernes13 ó Jerusalem, MichaelAngelo son nombres que aún recuerdo bien y con los que me peleé hasta reirme de mí y de ellos. Yo apenas sabía que hacía, pero sabía como eliminarlos, como arrancar un ordenador infectado sin que el virus se despertara y cepillarmelo mientras dormía. Muahahahaha!!!

Me dedicaba a perseguir a los cuatro gatos que tenían ordenador y a coleccionar sus virus para ver qué hacían. Entonces los hijos de la gran puta (con todo el cariño) empezaron a mutar. Tu virus, cambiaba mínimamente con cada contagio y los antivirus que se hacían por entonces empezaban a alucinar y a no detectar una mierda. Y yo seguía alucinando. ¡Parecían estar vivos!

Hablé en un par de ocasiones con un profe de informática del instituto para que me explicara cómo funcionaban y cómo se hacía un virus ^_^. Lo único que obtenía por respuesta era "los virus son los programas más difíciles de crear, el día que sepas hacerlo serás un puto crack". Bueno, quizá las palabras no fueron esas, pero la esencia es la misma. Pero tampoco me ayudaron mucho más. Cabrones.

Todo quedó más o menos ahí hasta que, mucho más tarde, en la uni, en la asignatura de Microprocesadores descubrí el "Ensamblador". No os voy explicar cómo funciona un microprocesador por dentro porque, a parte de perderme el respeto para siempre, no entenderíais una mierda y yo no sería capaz de hacerlo en menos de 20 páginas. En fin, que me voy del tema. El caso es que el Ensamblador (el nombre mola, eh?) es el lenguaje de programación más baturro que hay. Es el paso siguiente a hablar con un ordenador por encima de hablarle así: "00110001111010101100110000100010011".
Pues bien, mientras aprendía cómo funcionaba un microprocesador ("micro" para los frikis electrónicos) por dentro y cómo se podía "hablar" con él sin volverte loco (de hecho, a estas alturas de la carrera ya estabamos todos un poco pa' allá) descubría el alma de los virus. Dónde se escondían, cómo se creaban, cómo se propagaban. Vaya, que los tenía cogidos por los huevos. Lástima que siempre me hayan caído bien. Y estaba claro, había que ser muy crack para crear un virus. Y yo empezaba a serlo.

Total, que en unos meses creé mis cuatro virus de laboratorio (véase mi habitación) que me jodieron varias veces mi ordenador y ahí acabó todo. Podía hacerlo. Nunca los liberé al mundo aunque hubiera estado guay verlos en las listas de los principales antivirus, pero los algorítmos heurísticos de éstos los habrían aniquilado antes de contagiar a un centenar de máquinas. Cabrones.
Así, que ahí están aún, en casa. En un disquette, creo. Ni siquiera les puse nombre.

Con la aparición de internet el tema de los contagios se volvió mucho más crudo y además aparecían los típicos niñatos que cogiendo un programa base y modificando cuatro chorradas, creaban un virus nuevo (bueno, casi siempre eran troyanos -pero no voy a entrar a diferenciarlos-) y se pasaban los antivirus no actualizados por el forro de los cojones. Pero esto a parte de no tener ningún misterio, no hace más que dar por culo. Y aún seguimos en ese punto, más o menos.

Toda esta chapa viene a que el otro día encontré la página de un flipao en la que encontrabas esto:


Blog.Worm


me hizo algo de gracia (algo) y me recordó todo esto que os he puesto aquí. Y como al menos el colgao en cuestión ha tenido la decencia de no poner publicidad en su página (al menos de momento) pues le pongo el enlace este. Y le rindo algo de homenaje a esos bichillos a los que (lo sé) odiais y con los que yo siempre he alucinado. Incluso durante aquellos días en los que decía "si algún día me hago programador, por favor, pegarme un tiro".

Y aquí estamos...

Espero que no me hayais perdido el poco respeto que me teníais.

miércoles, marzo 22, 2006

Permanente

Está claro que hoy hay un post obligado.
La banda terrorista ETA declara un "alto el fuego permanente".

Ahora empezarán unos y otros a entrar en las discusiones de siempre sobre qué quiere decir "permanente", por qué es un "alto el fuego" y no un "abandonar las armas", etc.

A mí me la suda. Desde luego yo no he vivido este conflicto ni mucho menos como el pueblo vasco, pero puedo entenderles perfectamente y hacerme a la idea de lo que debe ser vivir en una sociedad con ese transfondo violento a diario. Sé que poca gente creía en una solución pacífica y sé que hay gente que tenía ganas de luchar por lo mismo que ETA pero a la que ETA, una y otra vez les reducía los argumentos a cenizas.

Me la suda simplemente porque esta noticia, por muchas suspicacias que levante, es única. Jamás habíamos escuchado esto antes. Es más, hace pocos años era impensable. Me da igual quién sea el responsable de conseguirlo, PSOE, PP o ETA o PNV. Me da igual.

Felicidades señores de uno y otro bando y felicidades a los que no están en ningún bando.
No desprovechéis esta mano tendida.

Yo me he emocionado, qué quereis que os diga. Es algo que no pensaba escuchar en mi puñetera vida y resulta que ahí está, delante de nuestras narices.

Pues eso,

eskerrik asko

lunes, marzo 20, 2006

¿Inteligencia superior?



¿Se puede saber quién coño ha puesto lo de mear, dar gustito y hacer chiquillos en el mismo sitio?

¿Me lo quiere explicar alguien?

Hay que ser gilipollas, coño.

viernes, marzo 17, 2006

brindo por el vino

venga,

más canciones primaverales:



Esta canción fue la banda sonora de una de las fiestas más delirantes de mi vida (que es decir, creánme). Tuvo lugar en Haro (La Rioja) durante la totalmente recomendable "Batalla del vino". No se la pierdan por nada del mundo.

Mil besos a aquella mujer que ni sé como se llama, ni dónde vive (era de Laredo?) pero que en el punto álgido de la fiesta se empeñó en hacermela mucho más amena. Qué gente.

Maldita sea, si no hubiera sido el tontopollas que era, ahora quizá aún nos escribiríamos cartas, coño.

En fins, brindo por la mujeres que derrochan simpatía. Otra vez.

Que tengan un buen fin de semana. Yo este lo tengo movidito. Ya contaré.

jueves, marzo 16, 2006

Croac



Caminando por el sendero húmedo del bosquecillo que hay frente a mi casa, no pude evitar ver aquel sapo que, torpe, se movía intentando salir del camino en dirección a lo más verde.
"¡Ecs!" fué lo primero que pensé. "¡Qué cosa más viscosa y repugnante!".
En aquel momento el sapo se me quedó mirando fijamente con una expresión en su cara que juraría que reflejaba un absoluto y total desprecio. Como si me hubiera leído la mente.
Yo seguí observándolo algo agachado y un poco alejado. Nunca se sabe si los sapos estos pegan saltos a la yugular de los transeúntes... Él parecía haber desistido de su idea inicial y ahora intentaba girar lentamente, como si cargara una pesada losa, su cuerpo en dirección a mí.
Yo por entonces, ya no tenía ninguna duda de que aquel asqueroso batracio pretendia saltar a mi cuello, así que dí un precavido paso atrás intentando salir de su alcance de tiro ya que, todo sea dicho, tampoco disponía de ningún dato fehaciente que me indicara, ni siquiera me diera una leve pista, de cuál era exactamente la distancia que podía alcanzar un sapo como aquél en actitud hostil.
Y ahí seguía yo, observando las berrugas de su piel y la baba transparente que parecía recubrile y que tenía el curioso efecto de desehechar de mi mente cualquier intento de atrapar a semejante bicho.
Él, mientras tanto, ya había girado todo su cuerpo y nos manteníamos frente a frente. A él, parecía costarle un grandísimo esfuerzo el hecho de levantar la mirada hasta mí y yo empezaba a pensar que aquel sapo sería incapaz de conseguir hacerme un rasguño por mucho que se lo propusiera. Aunque yo no pensaba acercarme un centímetro más. Por si acaso.
- Hola ¿quieres darme un beso?- dijo de pronto el sapo.
- ¿Pero qué me estás diciendo bicho asqueroso? ¿pero cómo quieres que te dé un beso? ¡Si estás lleno de babas!
- Oye, que yo no te quiero besar. Que eres tú el que estabas ahí alelao mirándome con esa cara de pasmo. Y además, a mí sólo me gustan las mujeres.
- Querrás decir las ranas.
- ¿A tí te gustan las ranas?
- !Puaj! ¿Qué dices?
- Pues a mí tampoco.
- Sucio sapo pervertido...
- Oye, que el que estaba ahí parado mirándome el culo, eras tú.
- A ver, sapo creído, te estaba mirando porque no había visto en mi vida un sapo de cerca. Ni siquiera sé dónde tienes exactamente el... tu... ¡Bah, déjalo!
- Mira, vamos a empezar otra vez. ¿Qué haces aquí?- dijo mirándome con condescendencia, el jodido sapo.
- Vivo ahí- le respondía yo señalando la casa sin apartar la vista de él.
- Lo sé. A veces vengo a verte, como hoy, pero ya me iba.
- ¿A verme? ¿A mí?
- Sí
- ¿Y que querías?
- ¿Acaso tengo que querer algo para venir a verte?
- Em... No. Supongo que no.
- Simplemente me gusta verte correr por el jardín y ver como lees sentado en aquel tronco mientras sonríes.
- ¿Te tocas mirándome?- dije sin poder evitar poner una nueva cara de asco.
- No digas tonterías.- dijo con un atisbo de perder la paciencia- De un tiempo para acá me he acostumbrado a tu compañía y lo hago simplemente porque estoy a gusto. Es como ir al prado a contemplar vacas pastando o a aquella loma a ver ponerse el Sol.
- Eres raro, sapo.
- Jonás. Me llamo Jonás -matizó, muy digno, el sapo Jonás- ¿Acaso el hecho de hacer las cosas sin una motivación directa y sin esperar nada a cambio hace que sea raro? ¿Es necesario que te pida algo para que entonces dejes de desconfiar de mí justo después de asignarme a algún estereotipo tuyo que te deje vivir feliz? ¿Crees que necesito algo de tí para que te sepas más necesario de lo que recordabas? Lo siento, no conseguirás nada de eso conmigo.
- ¡Eh sapo!
- Jonás.
- Bien, jonás. Yo era muy feliz antes de saber que andabas por ahí espiándome. No necesitaba de tus lecciones de moralina y mucho menos de tus atenciones.
- Perfecto. Lo que se trata es de que entiendas que el universo no gira en torno de nadie, es más, me atrevería a decir sin miedo a equivocarme que no gira entorno a nada. Que la gente no tiene porqué hacer las cosas siguiendo una motivación especial, y mucho menos la que tú crees que siguen. Nos acostumbramos a pensar por los demás y a jugar a adivinar lo que piensan y obviamente nos equivocamos.

En ese momento el sapo se quedó mirándome sin verme, abstraído. Yo, sin saber aún qué decir me senté a su lado y después de dejarle unos segundos consigo mismo me atreví a sacarle de su ensoñación.

- ¿Una mujer?
- Sí, tío- me dijo ya derrotado.
- Tranquilo, tú sigue viniendo a espiarme a mi jardín que yo seguiré haciendo lo mío. No pasará mucho tiempo hasta que se te acerque la próxima afortunada que te quiera dar ese beso. No sé muy bien porqué, pero así es y así seguirá siendo.

Le dí un par de palmaditas en su baboso lomo y él, algo más contento se encaminó de nuevo al bosque. Yo, me limpié la mano en la pernera del pantalón, y me volví a casa. A hacer lo mío, que es lo que he hecho siempre y que además se me da bien.








Alguna vez me gustaría escribir cosas que entendiera la gente. De verdad que me gustaria.

Bah! ¿y lo que me río?

viernes, marzo 10, 2006

Primaverazo

Ya está aquí. Se nota. Se huele. Tu ombligo cosquillea jugueteando debajo de la camiseta gritándote porque quiere ver el sol. El sol te acaricia la mejilla (siempre me ha hecho gracia esta metáfora, pero es real como la vida misma) y te activa la circulación dormida desde septiembre.
El cielo no es gris. Ya es azul.
Un hormigueo en la nariz te dice, te avisa, que la primavera ya viene.

Los pies calentitos. La estufa guardada. Las ventanas abiertas de día. El sol haciendo daño entrando por las rendijas de la persiana.

Mi terraza. Cómo hecho de menos mi terraza en invierno. En invierno sólo salgo a poner y tender lavadoras. Deprisa. Apretando el cuerpo.
Llega el momento de salir allí, sentarse, abrir esa cerveza que tienes en la nevera, abrir tu latita llena de hierbagüena, empezar con la fotosíntesis anual y ponerte algo de música. No sé... Algo como esto:



... malditos jipis!

martes, marzo 07, 2006

Esperanza del mar



El "Esperanza del mar" es un buque hospital fletado por el Instituto Social de la Marina que se dedica al salvamento en el mar, básicamente en la costa atlántica africana. Se trata del único barco de estas características que trabaja en la zona. Y creo recordar que el único del mundo construido con el único propósito de dar asistencia médica en alta mar.

Hace unos meses vi un reportaje filmado a bordo de tal buque y mientras lo veía pensaba que aquello era más propio de un millonario filántropo que de un proyecto nacional.
Es muy común encontrar en el día a día ejemplos de política represiva, de levantar fronteras, de imponer criterios, etc. Pero ejemplos como este, la verdad, a mí me sorprenden.
En dicho reportaje aparecían numerosos ejemplos de servicios que ofrecían en su día a día. Buques pesqueros lanzaban su llamada al que sabían próximo buque hospital. Cosas como un dolor de muela, un pequeño hilo de acero clavado bajo la piel, un mal resfriado.. se convierten en auténticas pruebas de vitalidad en alta mar, cuando no tienes posibilidad de volver a tierra y tus fuerzas están debilitadas por los meses de flotar al vaivén de las olas.
Todos y cada uno de ellos respiraban aliviados cuando el patrón del barco en el que trabajaban les decía "Tranquilo, el Esperanza del mar está cerca".

Desde aquí mi entera admiración a la persona o personas que estén detrás y al frente de este proyecto y a todo aquél que en poca o gran medida tenga que ver con él. Me quito el sombrero y les doy mi enhorabuena. Gracias.

Bien. En estos momentos hay una patera a la deriva entre las costas de Canarias y Mauritania con un oleaje que nos haría apretar el culo a todos los que leemos esto. Nadie sabe muy bien donde está, nadie ha podido comunicarse con ellos, pero hoy en el periódico leía que el Esperanza del Mar está en la zona.

Suerte amigos. Aguantad que el "Esperanza del mar" está cerca.


*********************************************

Por otra parte, y cambiando radicamente de tercio quería dejar constancia de que este sábado pasado tuve el inmenso placer (sin lengua de momento) de conocer personalmente a la Serda, el tupac, a la lince y a su contrario el Ripy. Con la aparición estelar e imborrable del hijo del fonk. Cuánta gente abrazable a más no poder corre por ahí, la hostia.

Después de esto, a uno le entran las ganas de recorrer la geografía nacional en busca de todos los personajillos que se van dejando caer cada cierto tiempo por aquí. Por mi mente ya deambulan ideas de un par de viajes en ciernes. Uno a ese Madrí desconocido y otro al Viña.

Vayan haciendo sus reservas.

viernes, marzo 03, 2006

Aquí, estrujando



Sí, sí. En el ojo del huracán de las ideas estoy yo. Flotando cansinamente con mi balsa de madera y mi patito de goma haciéndome compañia. Con un sol de cojones, eso sí.

Pues eso, que quería escribir un cuento como próximo post pero me está costando una jartá. Como castigo, ni cuento, ni post chorra adolescente, ni canción ni ná.

Totals...